Foucault. Derecho de muerte y poder sobre la vida
nombre del soberano al que hay que defender; se hacen en nombre de la existencia de todos; se educa a poblaciones enteras para que se maten mutuamente en nombre de la necesidad que tienen de vivir” (87).
Este punto interesante para entender como es que ahora las hegemonías se van construyendo en torno a un bien común, definido por la existencia de un todos excluyente. La perspectiva de Foucautl sobre el biopoder nos deja hilar en la trama que está en los discursos de la sociedad occidental liberal, que reivindica el bien común como tema primordial y por el que tiene que velar, a cualquier costo. Este poder establecido, que perméa los distintos ámbitos de la sociedad, se invisibiliza, haciendo que los individuos no cuestionen que el poder ejercido para la existencia de todos lo que hace es inmolar a unos por otro, de manera legítima. En este punto nos plantea la posibilidad de pensar en el todo en tanto espacialidad. Entonces Foucault nos abre preguntas sobre como y quien define el todo, y de esta manera, delimita los espacios. Es importante analizar como el discurso de la existencia de un todo se hace legítimo e incuestionable. Así el poder ejercido sobre el cuerpo, dentro de un espacio, un todo, cobra legitimidad en tanto se apoya en una concepción de la existencia de todos.