Framed Gender Violence: Insights from Latin American Fiction and Film

Lucha cada día


Cuando vemos imágenes que implican dolor, destrucción y caos, a menudo nos sentimos cautivados por las víctimas de estos actos. Tendemos a centrarnos en la reacción, el lenguaje corporal y los rasgos que desprenden las víctimas de la violencia debido a lo devastador que resulta ser testigo de tales hechos a otra persona, y con razón. Así que hemos querido hacerlo analizando las diferentes luchas que se producen y el estado en el que se encuentran las víctimas al experimentar esta violencia, ya sea por la muerte de un ser querido o por pasar por una experiencia incómoda que desgastar físicamente a cualquiera. 


En las paginas que siguen, queremos mostrar cómo la fotografía pueden capturar los efectos que la violencia imprime por las víctimas de violencia. Como esta foto, donde uno puede ver el impacto que ver y experimentar violencia tiene en comunidades y especialmente en los niños. Podemos ver las miradas decepcionadas y cansadas por las personas que rodean los restos de su querida, una víctima de violencia del ejército. Del niño en el centro, solo podemos ver sus ojos, asomándose por la mesa. Posiblemente hay un nivel de curiosidad en los ojos del niño, pero también parece como él no ha parpadeado, viendo los restos hasta que su mente acostumbre a lo que está mirando. Su presencia, al centro de la foto, es una presencia inocente en el medio de una escena tan trágica que es el resultado de violencia y la falta de responsabilidad del ejército, la gente que debería proteger la comunidad. 


Dicho esto, hemos decidido profundizar en los distintos obstáculos físicos y mentales que sufren las víctimas de la violencia. Buscamos destacar las cosas que a menudo se pasan por alto, pero también el siguiente paso en el que no se suele pensar y que es: seguir adelante en la vida después de la violencia sufrida. A menudo nos centramos en lo negativo que se nos presenta, por lo que no siempre miramos hacia delante ni pensamos en lo que les ocurre a otras personas, sólo en lo que están viviendo en el presente. Por eso, buscamos analizar también el progreso que están viviendo no sólo las víctimas de las fotos que elegimos, sino el progreso que vivimos todos cuando experimentamos un momento de caos en nuestras vidas. 
 

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