Laura García
Buenos días. Hago parte del Centro de Estudios Abolicionistas por la liberación Animal CEA-LA. Somos un colectivo más de carácter urbano. Nuestro planteamiento tiene que ver con una resistencia a todos estos tipos de sistemas opresores. Nosotras resistimos y transformamos y decimos que esa transformación tiene que verse más allá, es decir, ¿qué queremos transformar? ¿Para qué queremos nuevos modelos de vida? y decimos que no solamente lo queremos para las especies humanas, sino que queremos que haya vida digna para todas las especies, para la naturaleza. Entonces, lo que nosotras proponemos es la construcción colectiva de nuevas relaciones, de nuevos pensamientos; también proponemos borrar esos imaginarios que nos han impuesto en torno a cómo nos relacionamos con la naturaleza, cómo nos relacionamos con nosotras mismas, con nuestros cuerpos, con las demás especies. También proponemos la construcción de un nuevo modelo de país, que permita la vida digna de todas las especies de la naturaleza. Por eso mismo nos organizamos en el Tejido Juvenil Nacional Transformando la Sociedad (TEJUNTAS), que (como su nombre lo indica) es un tejido donde convergen diferentes colectivos. El tejido está conformado a nivel nacional y caben diferentes reivindicaciones; encontramos reivindicaciones que le trabajan al tema de la cultura, al tema de la liberación de las mujeres, al tema de los derechos laborales.
Nuestras banderas de lucha son la anti militarización de la vida, porque estamos en contra (hablando ya del tema de la paz) de estos sistemas que nos obligan a poner nuestros cuerpos como botines de guerra. Esa imposición es una alienación mental y física. Los y las jóvenes nos pensamos el país de forma distinta, queremos construirlo, queremos aportar desde lo que somos, pero no para seguir alimentando la guerra. También, como tejido, nos disputamos escenarios institucionales, pues es sabido que a las y los jóvenes nos invisibilizan. Queremos mostrar que nosotros nos pensamos el país de forma distinta.
Frente al tema de la vida, como colectivo ,reconocemos que estos sistemas, precisamente, nos han hecho rechazar totalmente nuestra naturaleza, nos han alejado cada vez más de ella. Por eso evidenciamos los grandes problemas que hoy nos acongojan y también nos convocan a la resistencia. Uno de esos grandes problemas es que muchas veces nos rechazamos como especie animal, decimos: “no somos especie animal, no somos animales”. También en nuestro mismo lenguaje rechazamos muchas cosas propias de la naturaleza y olvidamos esa esencia de lo que somos, olvidamos nuestras raíces, olvidamos que también tenemos un pasado raizal como ciudad. Eso nos hace alejarnos de la naturaleza y nos hace permitir cada vez más que el sistema nos atrape, nos coercione. Por eso mismo, nuestra lucha y resistencia parte, primeramente, de un reconocimiento de nosotras mismas, de cómo nos sentimos frente a las relaciones con nuestros propios cuerpos, con todo. Proponemos pensar si nuestra dieta, con la excusa de alimentarnos cómodamente, está afectando a las demás especies y está permitiendo también que se pase por encima de los intereses de las comunidades y los pueblos. Proponemos pensar si desde la ciudad se está respaldando las multinacionales, sin apoyar la soberanía alimentaria y sin apoyar, precisamente, a nuestros pasados y orígenes. Por eso mismo, apoyamos totalmente la soberanía alimentaria.
Como colectivo, estamos proyectándonos para aterrizar nuestro trabajo, porque nuestro trabajo ya lleva un recorrido de más o menos cinco años, en los cuales nos hemos dedicado más que todo a ese trabajo investigativo y de producción más que todo académica. Pero es importante aterrizarlo ya; tenemos los insumos para empezar. Por eso mismo, vamos a empezar a trabajar haciendo talleres culturales en barrios populares, específicamente, en la localidad de Bosa. Entonces, en cuanto al tema del territorio, podríamos decir que, en primer lugar, reconocemos que el territorio va más allá de lo geográfico. Nosotras y nosotros también somos territorio. El territorio lo construimos, pues no es solamente algo que está ahí y ya, sino que lo construimos, lo pensamos, lo apropiamos y defendemos.
En cuanto al tema de la resistencia, quisiéramos decir que estamos en contra de esos sistemas alienantes y opresores, y por eso estamos en contra de los sistemas patriarcales; estamos en contra de los sistemas de discriminación de la vida, como el especismo, esto es, la consideración de que podemos decidir de forma negativa sobre las demás especies, sobre sus cuerpos y sus necesidades innatas de sobrevivir, solo por el hecho de que tenemos diferentes facultades a ellas. También estamos en contra de los modelos extractivitas actuales neoliberales y apostamos más que todo a la construcción de nuevos tipos de pensamiento, de nuevos imaginarios por y para la vida digna. Como TEJUNTAS, hacemos también parte del congreso de los pueblos, como sector juvenil, pues creemos vehementemente en la vida digna, en que es posible alcanzarla si construimos de forma colectiva, si hacemos una profunda lectura y análisis, y si problematizamos cada vez más las relaciones que tenemos con todo. Entonces, creemos en la vida digna y, específicamente, decimos que vida digna es todo, es la resistencia, es la paz, es la construcción de nuestros territorios.
Pablo Jaramillo: Laura y ¿qué acciones concretas han hecho frente a la construcción de esa vida digna de otras especies? ¿hacia qué se dirigen?
Laura García: En el recorrido del colectivo, hemos hecho, por ejemplo, diferentes festivales, muestras culturales y tomas territoriales en barrios populares. Estos festivales intentan acercarnos a las comunidades para hablar con ellas y para mostrarles diferentes alternativas como la soberanía alimentaria (la posibilidad de alimentarnos de forma distinta). Como somos jóvenes, entonces, tratamos de llegarle principalmente a jóvenes. También hemos hecho talleres, hemos hecho conferencias, hemos hecho publicaciones diversas como revistas y boletines.
Pablo Jaramillo: Me refería a qué clase de demandas hacen en esos momentos.
Laura García: Específicamente, en torno a los animales no humanos, estamos ahorita trabajando en el tema de la consulta anti taurina en Bogotá. Entonces, quisiéramos aprovechar para hacerles una invitación a que todos estemos muy pendientes de eso, pues como ciudad nos corresponde decir si realmente queremos que ese tipo de prácticas estén o no permitidas en nuestra ciudad. En diferentes momentos y articulados con grupos animalistas, también hemos trabajado en la formación de diferentes proyectos como movilizaciones, reconociendo esa fuerza de las movilizaciones.