Wall Street
Cabe mencionar que estos sentimientos encontraron su punto de quiebre con la crisis económica del 2008, más conocida como la gran recesión. En el escenario de un ambiente general de optimismo económico la inversión a largo plazo en vivienda por parte de los consumidores fue acompañado por el florecimiento de créditos de vivienda e hipotecas a clientes riesgosos. En este punto toma forma la caída del sistema hipotecario y crediticio estadounidense, en tanto que los bancos ejecutaron sus hipotecas y tomaron posesión de las viviendas de los clientes que no pudieron pagar sus deudas. En medio de esta situación, en Wall Street se empezaron a negociar los títulos de propiedad de dichos inmuebles con lo cual grandes empresarios tomaron posesión de estas viviendas.
En medio de una gran recesión económica, grandes tasas de desempleo y la perdida de las viviendas de muchas personas, la población observó cómo el gobierno nacional invirtió grandes sumas de dinero para rescatar a los bancos de la bancarrota, muchos de los cuales tuvieron responsabilidad en la crisis. Esta denuncia fue secundada por numerosos sectores de la población:
Tal como la muestra la Ilustración 2, la población señaló como responsables de la recesión a los bancos y las grandes corporaciones. Una denuncia que sirvió de puente para poner sobre la mesa la desigualdad en la distribución de la riqueza global y los impactos de prácticas como la especulación y evasión de impuestos. Pues al estar inmersos en una economía global, la economía nacional mantiene una interdependiente con muchas otras economías nacionales. Así que en el momento en que algún sector industrial entra en crisis, la economía empieza a desacelerarse, y genera desempleo. Un hecho que afecto la vida diaria de las personas pues sus ingresos para comprar la canasta familiar no eran suficientes.
No obstante, aunque el objetivo principal de la movilización era quebrantar el sistema financiero mediante dichas críticas económicas, al inicio del llamado a la movilización estas pretensiones no eran explicitas. Así mismo, en las primeras semanas del desarrollo de la manifestación, no era claro, desde nuestra perspectiva como usuarios de redes sociales, cuál era la agenda y orientación política de Occupy Wall Street. Es posible poner como ejemplo los primeros dos llamados a la movilización, en los que no hay referencia alguna a sus motivaciones y objetivos:
Además, a medida que avanzamos en el análisis de las publicaciones y los comentarios nos percatamos que se generó un cambio en el discurso oficial de la web, en la que se empezó a consolidar una crítica económica no solo dirigida al sector financiero sino también al gobierno. Un proceso que fue de la mano con las discusiones que tomaban forma en las publicaciones de Facebook. Sin embargo, fue difícil para nosotros observar estos cambios pues las temporalidades de los comentarios y las fechas en las que las publicaciones fueron realizadas no necesariamente concuerdan; por ejemplo encontrar una publicación de agosto de 2011 y observar en ella comentarios de diciembre de 2015.
El anterior post es el primero, tras casi un mes de iniciadas las actividades en la web, en el que es posible ver la articulación de las ideas y exigencias de la gente en una retórica que lo manifestara explícitamente. Ya se hace manifiesto una agenda política y los mecanismos de acción que se están utilizando, y deberán usarse en un futuro para llevar a cabo sus objetivos. En esta publicación se hace énfasis en la ocupación no violenta de las oficinas bancarias y calles de Wall Street, así como la presencia en las oficinas de los políticos para denunciar el tráfico de intereses con las corporaciones y la desobediencia civil como mecanismo de acción principal. Estas nociones develan la manera en que se amplió el foco de crítica y denuncia, se traslada a abarcar una gama más amplia de la vida social (corrupción, codicia, crisis ambiental, tráfico de intereses, etc). Sin embargo, es importante resaltar que en este punto empezamos a observar cómo el movimiento se constituye como comunidad y además configura su identidad en torno a la noción de resistencia, que a pesar de ser amplia y abarcar otros campos de la sociedad sigue teniendo su eje en la crítica económica del sistema.
“(…) a democratic government derives its just power from the people, but corporations do not seek consent to extract wealth from the people and the Earth (…)
They have poisoned the food supply through negligence, and undermined the farming system through monopolization.
They have profited off of the torture, confinement, and cruel treatment of countless animals, and actively hide these practices.
They have held students hostage with tens of thousands of dollars of debt on education, which is itself a human right.”
(Recuperado de la página oficial del movimiento el 19(03/2016 de https://www.facebook.com/OccupyWallSt/info/?tab=page_info)
“(…) un gobierno democrático que derive su poder justo de la gente, pero que las corporaciones no busquen permiso para extraer la riqueza de la gente y de la tierra (…)
Ellos han envenenado nuestros suplementos de comida, y quebrantado el sistema agrícola a través de su monopolización.
Ellos se han beneficiado de la tortura, encierro y tratamiento cruel de incontables animales, y activamente esconden sus prácticas.
Ellos han secuestrado estudiantes con decenas de miles de dólares en deudas en educación, lo que es en sí mismo un derecho humano” (la traducción es nuestra)
La cita anterior hace referencia a diversas críticas que abarcan desde el maltrato de los animales hasta las deudas educativas de los estudiantes norteamericanos. Son ejemplos de la ampliación del discurso político del movimiento, aunque mencionan constantemente a un “ellos” que refiere a las corporaciones; permanece la oposición hacia los empresarios y la retórica de denuncia en materia económica como eje central de las críticas del movimiento.
