Occupy Wall Street

Introducción

El 17 de Septiembre del 2011 en las cercanías del distrito financiero de Nueva York, mejor conocido como Wall Street, un grupo de personas se congregó con el fin de conformar una protesta pacífica en relación al sistema financiero global que había llevado a Estados Unidos, y gran parte de la economía global, a la Gran Recesión del 2008.

La movilización fue convocada por diversos medios sociales y grupos políticos como la organización anticapitalista canadiense Adbusters y el grupo de cyberactivistas Anonymous. Este hecho que tuvo su comienzo por el llamamiento a través de una cadena de correo por parte de la revista Adbusters experimentó un efecto de bola de nieve a medida que se difundía por las redes, así otros grupos y figuras políticas se vincularon a esta movilización como la cadena radial Democracy Now.

Con una participación inicial de cerca de unas cientos de personas, el movimiento fue creciendo en número y cobertura mediática. Los manifestantes, que agrupaban a diversos grupos de edad y orientación étnica, acamparon en los parques aledaños al distrito financiero. Una práctica que no los abstuvo de ser víctimas de la represión policial que intentó reprimir las movilizaciones, cuyo número alcanzó un estimado de 15.000 personas en las marchas del 5 de octubre (Greene, 2011). Sin embargo, las ocupaciones abarcaron otros espacios emblemáticos como lo fue el puente de Brooklyn y la Universidad de Yale.  Con la expulsión de Zucotti Park y la llegada del invierno, la permanencia en los parques se hizo muy difícil y el movimiento experimentó un fuerte revés en la intensidad de las manifestaciones. A pesar de que las ocupaciones continuaron al año siguiente no ocurrieron con la misma intensidad. Sin embargo, ciertos grupos que se entablaron durante las protestas han perdurado y continuado activos en el ciberespacio hasta el día de hoy.

Esta investigación se ha enfocado en el actuar de este movimiento social dentro de las redes sociales, especialmente Facebook, entre el 17 de Septiembre de 2011 y el 17 de Octubre de 2011. Nuestro trabajo de campo se desarrolla en el ciberespacio como un lugar de organización y performance (Burford, 2013, p. 3) en el que Ocupa Wall Street se desarrolla. Un interés que nace por nuestra preocupación de abordar temáticas y realizar trabajo de campo en lugares que son hoy en día poco explorados en la disciplina antropológica. Nuestro interés en el estudio de las relaciones entre tecnología y sociedad nos llevó a centrarnos en este movimiento con el propósito inicial de entender la manera en que los discursos presentes en la red se articulan con los ideales de democracia en Estados Unidos. Luego de entrar en contacto con el campo, la experiencia nos llevó  a enfocarnos en un concepto propio del movimiento: “StreetNet”, pues abarcaba nociones de identidad, democracia y periodismo ciudadano a través de un puente entre las manifestaciones callejeras y el uso de las redes sociales. Sin embargo, al realizar un análisis de redes en la plataforma de Atlas.ti nuestro eje de interés sufrió nuevamente una transformación, hemos centrado  nuestro interés en ahondar en las formas de resistencia del movimiento y al tiempo la manera en la que  éstas construyen comunidad.

Aunque el acercamiento a esta investigación ha estado marcado por tropiezos debido a la falta de experiencia en este tipo de trabajos y las escazas aproximaciones antropológicas, nos hemos enriquecido al vernos en la necesidad de tomar como fuentes teóricas trabajos de otras disciplinas. La metodología que hemos utilizado para el análisis de las redes sociales ha sido muy intuitiva, producto del ensayo y el error, pues los textos abordados no han podido darnos luz sobre aproximaciones metodológicas.

En un comienzo delimitamos las redes sociales a trabajar y la escala temporal para cada una de ellas. Decidimos utilizar las páginas oficiales de Ocupy Wall Street en Twitter y Facebook, aunque  luego de estar en campo nos dimos cuenta que la cantidad de información publicada en Twitter era inmanejable debido a la imposibilidad que el medio ofrecía para delimitar cronológicamente las publicaciones de un único usuario.  Además, nos percatamos que la característica de Twitter es la inmediatez de la información; en un solo día encontramos más de mil Twitts. Por esta razón, enfocamos el trabajo a Facebook como fuente de análisis de discurso y de imagen, así mismo acotamos la periodicidad del movimiento del 17 de septiembre hasta el 17 de octubre. La metodología que utilizamos fue la organización de  las publicaciones y los comentarios en categorías definidas bajo elementos comunes que veíamos en el campo; a decir, categorías como identidad, democracia, crítica política, globalización entre otras. 

Ahora, respecto al trabajo nos interesa analizar el carácter dual de estas comunidades cuya presencia se da tanto en espacios físicos tangibles como en  el ciberespacio. Por ejemplo, el movimiento actuó en plazas, calles y parques de la ciudad de Nueva York además de las redes sociales, YouTube y blogs de opinión. Es relevante tomar en cuenta como tema de estudio el uso del internet y los medios de comunicación desde una mirada antropológica puesto que, siguiendo a Vattimo, el nacimiento de la posmodernidad está determinado por la difusión de una  multiplicidad de voces que se encuentran en diversas esferas de la vida cotidiana lo que resulta en una sociedad más compleja y caótica (Vattimo, 1990, p.78). En este sentido, los medios de comunicación, en especial las redes sociales, son una tecnología que termina por configurar espacios de socialización en los cuales las personas se construyen a sí mismas. Por esta razón, entender que la internet es “una brillante tecnología en medio de una vasta constelación de dispositivos tecnológicos, sistemas y hábitos que comprenden la forma occidental de conocer y actuar, de ser en el mundo” (Barney, 2007, p. 38)  permite darnos cuenta que las redes sociales durante el movimiento no fueron sólo una herramienta de comunicación sino también un espacio de discusión, organización, denuncia y configuración de identidades.
Finalmente la forma de representar el movimiento en un índice responde a nuestro deseo de dar cuenta de los fragmentos y tensiones que caracterizan al movimiento, así como su hipertextualidad. Eventualmente quisiéramos desarrollar el trabajo en una plataforma que nos permita crear con facilidad vínculos entre la información, y navegar no linealmente en el texto; es decir que el texto pueda ser leído en el orden que el lector quiera a través del uso de hipervínculos (característica común de la navegación web) y representaciones visuales interactivas que funcionen como viñetas etnográficas  (elementos que reflejan nuestra experiencia en el campo e invitan al lector a experimentar un extrañamiento con los eventos).

Estas características son parte integral del movimiento, a través de ellas se consolidaron redes de solidaridad, organización y resistencia. Una de las experiencias que más nos impresionó fue leer cientos de comentarios en torno al desarrollo de las protestas en el puente de Brooklyn, pero fue solo al acercarnos a los videos e imágenes publicados por los participantes que nuestras experiencias y percepciones sobre el movimiento sufrieron una gran transformación al entender la envergadura que este había alcanzado. Por esta razón, utilizamos la plataforma de Scalar como formato de presentación de nuestro trabajo final, luego que nos permite jugar con los hipervínculos e insertar videos e imágenes para tratar de representar no sólo nuestra experiencia en campo sino también pequeños fragmentos de lo sucedido durante las manifestaciones. 
 

This page has paths:

Contents of this path: