Los Impactos Diferenciados del Extractivismo
"Lo que le sucede a la tierra, le sucede a las mujeres de la tierra. Cuando la tierra y el agua son violadas, envenenadas, y destruidas, las mujeres se ven profundamente afectadas. Como mujeres indígenas, la conexión con nuestro territorio no es solo física, es biológica, y espiritual. Siempre hemos estado en primera línea cuando nuestros territorios tradicionales están en riesgo." -- Alma Brooks, Abuela Maliseet, St. Mary’s First Nation, New Brunswick
El género es fundamental para el extractivismo. Más explícitamente, la sobrerrepresentación de los hombres como la fuerza laboral predominante tanto en los campos de trabajo como en otros lugares comienza a confirmar el papel del género en relación con el extractivismo. Sin embargo, una comprensión más compleja y más profunda aún sobre el extractivismo reconoce las formas múltiples y complejas que el género lo sostiene y viceversa.
La extracción de recursos a gran escala como modelo de desarrollo económico se basa en principios que tratan a la Madre Tierra, específicamente a los territorios indígenas y afrodescendientes, como terra nullius, tierra fértil lista a ser poseída de donde se obtienen ganancias y poder. Esta es la lógica que privilegia la acumulación de propiedad privada mediante el despojo de las comunidades indígenas y afrodescendientes de los espacios donde se han forjado relaciones recíprocas con la tierra, el agua y otros seres vivos y no vivos. Tal supuesto derecho impulsa y otorga relaciones no consensuadas con la tierra, su gente y sus recursos. Y la autorización del poder a través de la coerción es una distinción de las nociones dominantes de la masculinidad.
Por lo tanto, no es sorprendente que quienes más directamente viven los impactos negativos del extractivismo sean las mujeres, los niños y las personas consideradas no-normativamente orientadas en términos de género y sexualidad, incluso los pueblos indígenas y afrodescendientes. No es aún difícil prever que sean particularmente las mujeres las líderesas en la defensa del medio ambiente frente los impactos del extractivismo
Los impactos diferenciados del extractivismo se pueden agrupar ampliamente en cinco categorías que suelen solaparse: sociales, económicos, de salud, ambientales y políticos e incluyen, entre otros, los siguientes ejemplos.
En términos de impactos sociales: las mujeres y sus familias sufren el desplazamiento de sus comunidades, sufren la destrucción de los conocimientos ancestrales y sufren diversas formas de violencia de género vinculadas al influjo de trabajadores masculinos en sus comunidades. Además, el estado tiende a desinvertir de las comunidades donde operan proyectos extractivos. Los servicios sociales financiados por el estado son débiles o inexistentes como resultado.
Económicamente: las discrepancias en la remuneración laboral entre mujeres trabajadoras indígenas temporales y empleados externos permanentes en sitios extractivos crean una brecha salarial que dificulta la capacidad de las mujeres para satisfacer sus necesidades básicas. Los costos de arrendamiento aumentan mientras que el número de viviendas disponibles disminuye, lo que lleva a situaciones de vida precarias. Las mujeres con hijxs enfrentan barreras adicionales, como asegurar un cuidado infantil con costos más alcanzables. Mientras que las mujeres enfrentan acoso y discriminación como empleadas del sector extractivo.
Desde el punto de vista de la salud: se han relacionado una variedad de enfermedades con vivir cerca de operaciones extractivas: cánceres, enfermedades gastrointestinales y de la piel y abortos espontáneos. El aumento de la violencia doméstica, el abuso de sustancias y el trabajo sexual son impactos adicionales en la salud mental y pública que ponen una carga excesiva en la vida de las mujeres.
La contaminación del aire y las fuentes de agua contribuye a los impactos en la salud a causa del extractivismo. Estos también son algunos de los impactos ambientales del sector extractivo. Los derrames y fugas de químicos en la tierra y en las fuentes de agua causan degradación ambiental; la deforestación es otra forma de degradación ambiental. La redirección de las vías fluviales y la apropiación del agua por parte del sector extractivo provoca escasez de agua. Se destruyen ecosistemas enteros a medida que las corporaciones manipulan la tierra y el agua para dar paso a la vasta infraestructura requerida para ejecutar una operación de extracción exitosa.
Las mujeres indígenas también enfrentan consecuencias políticas y civiles cuando se pronuncian en defensa del territorio y sus comunidades. Las mujeres a menudo son estigmatizadas, amenazadas, criminalizadas e incluso asesinadas por su trabajo político de proteger los derechos humanos, su territorio y el medio ambiente. Las mujeres son excluidas de sus comunidades y a menudo sufren campañas de desprestigio por cuestionar normas y expectativas sociales, específicamente de género. Líderes y miembros de la comunidad, actores estatales y las corporaciones atacan el carácter de las defensoras del medio ambiente y cuestionan su papel como madres y esposas. Por atreverse a imaginar una noción de relaciones sociales más allá de los modelos de la familia nuclear y la propiedad privada, tanto ellxs como sus familiares, en particular lxs niñxs, enfrentan una serie de consecuencias. Estos incluyen: los efectos en la salud física y mental de ser el blanco directo o indirecto del acoso físico y / o de presenciar las repercusiones que enfrentan sus padres, parientes o líderes comunitarios en la defensa de los derechos humanos y ambientales.
Para una lista adicional de los impactos diferenciados, favor de ver el informe de Susan Manning et. al. “Strengthening Impact Assessments for Indigenous Women.”
Las mujeres indígenas de La Isla de la Tortuga y Abya Yala son claras: los abusos que se producen en la tierra y el agua también se materializan como violaciones en los cuerpos de las mujeres. Women's Earth Alliance y Native Youth Sexual Health Network escriben cómo los efectos del daño ecológico en las comunidades indígenas y sus territorios constituyen lo que denominan violencia ambiental, "Los impactos desproporcionados y a menudo devastadores que la proliferación consciente y deliberada de las toxinas ambientales y el desarrollo industrial (incluyendo la extracción, producción, exportación y liberación) tienen sobre las mujeres indígenas, los niños y las generaciones futuras, sin que los estados o corporaciones tenga en cuenta sus daños severos y continuos".
Considerar los impactos diferenciados del extractivismo es envolver con siglos de despojo intensificados en las últimas décadas por cambios en la economía global que exageran la especulación y el consumo para las ganancias. Lo que las mujeres defensoras están haciendo, entonces, es proteger el medio ambiente y mantener una interpretación de la vida basada en relaciones recíprocas y consensuadas con la Madre Tierra y su abundancia.